OSE: agua potable en zona de Canelones amenazada por soja
15.03.2013
13.18
El agua potable desde Salinas hasta Costa Azul, en Canelones, está amenazada por los cultivos de soja que rodean la toma de OSE en la Laguna del Cisne, según denunciaron vecinos y académicos.
La Laguna del Cisne está delimitada al norte por la vieja ruta 8, al este por la ruta 11, al sur por la ruta Interbalnearia, al oeste por la ruta 87 y al noroeste por la ruta 34.
El problema mencionado se genera por la utilización de glifosato en las plantaciones de soja transgénica que llegan hasta los bordes mismos de la laguna, dijo a El Espectador la vocera del grupo Salvemos la Laguna del Cisne.
El producto químico se filtra en la tierra y a través del drenaje llega hasta la toma de agua.
Los vecinos denunciaron que no se han hecho los estudios correspondientes de la calidad del agua, por lo que no es posible precisar su estado. También recordaron que su efecto se produce por acumulación.
El glifosato es un herbicida de amplio espectro, que se aplica sobre las hojas de los cultivos y mata las plantas. Por ejemplo, lo utilizó EEUU para erradicar los cultivos de coca en Bolivia.
Sin embargo hay cultivos resistentes al glifosato, como por ejemplo la mencionada soja transgénica. Se aplica el producto, se eliminan las hierbas no deseadas, y la soja sigue su proceso.
El problema es lo que ocurre con el glifosato cuando llega al agua y ahí está el temor de los denunciantes.
Esta semana el catedrático de la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República, Daniel Panario, había señalado a El Espectador el peligro existente en la Laguna del Cisne, y de los fertilizantes, en particular del fósforo:
“La flemación de aguas es uno de los problemas, los plaguicidas que se están usando han aparecido en la toma de OSE, la laguna del cisne que da agua desde Atlántida y Parque del Plata esta rodeada de cultivos de soja, si no se controla esto vamos a tener problemas serios con mucha frecuencia”.
Al respecto, la vocera del grupo Salvemos la Laguna del Sauce, María Isabel Carcamo, indicó:
”Las plantaciones de soja llegan a pocos metros de la laguna y se sabe que el cultivo de soja tiene un paquete agro tóxico dentro de lo que esta el glifosato. Si no hay glifosato no hay soja y es contamínate, contamina el agua y hay estudios en Uruguay en lugares donde ya no se usa este producto que sigue habiendo residuos”.
La activista señaló que será necesario cambiar la reglamentación sobre la extensión de los cultivos:
“La gente de la zona esta a menos de 10 metros, hay una regulación del Ministerio de Ganadería en que dice que las fuentes de agua deben ser protegidas, las fumigaciones no se deben hacer a menos de 10 metros. Esta laguna alimenta a una gran población de Canelones, lo cual lo hace más preocupante aún al tema”.
Ante la pregunta de cómo está el agua que se consume en la Costa de Oro, la activista respondió:
“No sabemos si el agua esta contaminada porque OSE no ha tomado muestras del agua. La gente sabe que hay fumigaciones, cuando aparecen los problemas, cuando hay un extremo. Muchas veces son acumulativas estas situaciones y las sustancias mencionadas, si bien los efectos no aparecen de inmediato, a largo plazo si ocurren”.
La activista señaló que los vecinos “han constatado un deterioro ecológico, muerte de peces, anfibios, aves y disminución de la vegetación de superficie de la laguna”.
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