Siguen las denuncias por instalación de antenas de telefonía celular. AIMDIGITAL

Siguen las denuncias por instalación de antenas de telefonía celular

Publicado el 13 ago 2012. Archivado bajo Salud.

A pesar de las ordenanzas que lo prohíben, otra antena de telefonía celular se instaló en un predio de Concepción del Uruguay, denunciaron a AIM desde la ONG Vida de esa localidad. Asimismo, reclamaron respuesta al pedido de audiencia por parte de los vecinos.

Siguen las denuncias por instalación de antenas de telefonía celular.

A pesar de la ordenanza vigente 5227, “instalaron otra antena de telefonía celular en el radio urbano”, expresaron a AIM desde la ONG Vida.

“Días atrás terminó de armarse una antena de telefonía celular de Movistar en el predio del Polideportivo Tricolor, del Club Rivadavia, al noroeste de la ciudad. A raíz de esta nueva instalación, ratificamos la denuncia que el municipio sigue violando la ordenanza a partir de la instalación de estas estructuras de radiofrecuencia, que deberían estar ubicadas fuera del radio urbano”, agregaron.
“Hoy, el presidente del Ejecutivo Municipal, Carlos Schepens, autoriza esta nueva instalación ilegal como lo hicieron sus antecesores, (José) Lauritto y (Marcelo) Bisogni”, afirmaron y aseveraron que se solicitó audiencia con las autoridades pero aún no hubo convocatoria ni respuestas”.

Datos y cifras
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el uso de teléfonos móviles se ha universalizado: en el mundo hay unos 4600 millones de contratos.

El Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer ha clasificado los campos electromagnéticos producidos por los teléfonos móviles como posiblemente carcinógenos para los seres humanos.

Hay estudios en curso para analizar más a fondo los posibles efectos a largo plazo del uso de los teléfonos móviles.

En 2012, la OMS realizará una evaluación formal de los riesgos a partir de todos los resultados de salud estudiados en relación con campos de radiofrecuencias.

La OMS, a través de la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (Iarc), afirmó en 2001 que las radiaciones no ionizantes emitidas por las antenas de telefonía móvil son probablemente cancerígenas.

Asimismo, el Instituto de Bioelectromagnetismo de la Universidad de Alcalá de Henares (España) aseguró que la exposición crónica a este tipo de emisiones afecta en particular a la glándula pineal, provocando una disminución de la eficacia inmunitaria de los leucocitos (glóbulos blancos) y de la secreción de las hormonas responsables de regular los ritmos biológicos y una baja de las defensas naturales del cuerpo contra bacterias, hongos y virus.