Le envio un articulo, con una nota que me realizaron. Saludos
Desde Mones Cazón confirman que existen denuncias por el riego artificial
“Las nuevas perforaciones “supuestamente” clandestinas detectadas en el distrito, al sur de Mones Cazón próximas a los pozos de extracción de agua para consumo de la localidad, han sido denunciadas en diciembre ante el ADA por el Municipio y por la Cooperativa de Agua Potable de Mones Cazón”, aseveró el ex presidente del Concejo Deliberante de Pehuajó en diálogo con NOTICIAS. Hoy, cuando llegan épocas de sequía, la alternativa del riego artificial en ciertos lugares de provincia de Buenos Aires es una de las soluciones que encuentran algunos productores para resguardar sus cultivos. Pero cuando esta práctica se realiza en forma desmedida e irracional deteriora el caudal existente repercutiendo en los campos aledaños. También supone el empobrecimiento de las napas, que como en el caso de Pehuajó, sería loable preservarla como valioso recurso para la vida humana.
El fenómeno ocasiona problemas paralelos en las ciudades en crecimiento como la nuestra, donde la provisión del vital elemento, no es suficiente para cumplir con la demanda de infraestructura y equipamiento urbano.
En este sentido, los integrantes de la Comisión del Servicio de Agua y Cloacas que trabajan en defensa de la comunidad promoviendo el acceso al agua potable, continúan exteriorizando la inquietud que les genera el indebido uso del riego artificial en la zona de Mones Cazón – Magdala.
Para profundizar sobre esta cuestión dialogamos con el abogado Santiago Zaratiegui, ambientalista oriundo de Mones Cazón y expresidente del Concejo Deliberante de Pehuajó, quien en ejercicio de esa función reparó en el tema. Prosiguiendo con la tarea destinada a la conservación y preservación de los recursos naturales, como mejor calidad de vida para ésta y futuras generaciones.
“En la zona de Mones Cazón-Magdala se encuentra emplazado un acuífero, que de acuerdo a estudios, presenta condiciones hidráulicas y físico- químicas que permiten recomendarlo como fuente de provisión de agua subterránea para abastecer las demandas del distrito, (ver informe del INA septiembre de 2006). Sabido es, que el agua de calidad es un bien escaso en nuestra región, por lo cual resulta necesario que se adopten acciones tendientes a preservarlo para consumo, debido a que de su cuidado, depende y dependerá la salud de la población”, manifestó Zaratiegui advirtiendo: “El uso indebido del vital recurso es posible que no cause el agotamiento pero sí la contaminación y, cuando esto sucede, es muy difícil y costoso retornarlo a su estado original. Lo preocupante, más allá del aumento de perforaciones en la zona y que la mayoría, han comenzado con esta práctica de manera clandestina sin ningún tipo de controles, constituyendo un nuevo factor de riesgo que puede atentar contra la calidad y cantidad del mismo; es que casi todos se encuentran localizados al sur del distrito, en la zona donde según los estudios del INA se halla ubicado el acuífero Mones Cazón - Magdala. Entonces, resulta necesario que las autoridades adopten estrictas medidas de seguridad para evitar la contaminación por el uso clandestino del mismo, a fin de impedir que se afecte la calidad y cantidad en detrimento del interés general de la población”, enfatizó Zaratiegui.
-N: ¿Y quién es el encargado de controlar las perforaciones y de aplicar el Código de Aguas? -Z: Esta actividad está permitida, pero sujeta a las limitaciones de la Ley Nº 12.257 (Código de Aguas ) y resoluciones dictadas por la Autoridad del Agua (AA) bonaerense, pero la realidad demuestra que el grado de cumplimiento de esta ley es deficiente, al igual que el ejercicio de poder de policía que ostenta el organismo provincial antes mencionado, ya que no da abasto para atender y controlar la enorme geografía de la provincia, por lo cual resulta conveniente que el Municipio asuma el rol complementario de esa actividad de control, a fin de agilizar la lucha contra la clandestinidad y neutralizar los factores de riesgo que pueden estar presente cuando se realiza el riego de manera inadecuada o clandestina. En ese sentido, en el 2009, se presentó en el HCD un proyecto de ordenanza que apuntaba al cuidado y preservación de recursos hídricos subterráneos en el distrito de Pehuajó, en el que se proponía la emergencia ambiental del recurso en nuestro distrito y quedaba sometido al contralor Municipal, en forma conjunta y concurrente con la AA (Ley 12.257). Pero quedó en el camino, no se aprobó prácticamente ni se trató nunca.
-N: Entonces, resulta fundamental proteger el acuífero...
- Z: Si tomamos en cuenta las grandes distancias de Pehuajó a fuentes de agua superficiales (Río de La Plata, Paraná, etc) y la sobreexplotación a la que se ven sometidos los pozos que proveen agua para consumo de la ciudad y la calidad de ésta, además, le sumamos el panorama que se avizora en relación al futuro del agua, y si consideramos la calidad y la cantidad del acuífero ubicado entre Mones Cazón y Magdala de acuerdo al informe del INA, entonces resulta una prioridad que se trabaje en su cuidado y preservación. Por ese motivo es conveniente que se trabaje para que sea declarado zona de reserva con los alcances del articulo 2º inciso B del Código de Aguas, tal cual lo manifestado por el HCD de Pehuajó en el año 2010 mediante la Resolución Nº 52/10 de ese cuerpo.
-N: La Comisión del Agua local notificó a este diario -según admitió días atrás, el vicepresidente del HCD- que existen denuncias efectuadas en diciembre por la Cooperativa de Agua Potable de Mones Cazón ante el Municipio de Pehuajó, y que aún, no trascendieron públicamente. ¿Está al tanto de ésta situación?
-Z: En relación a estas nuevas perforaciones “supuestamente” clandestinas detectadas en el distrito, al sur de Mones Cazón, próximas a los pozos de extracción de agua para consumo de la localidad, si bien hay poca información sobre los alcances de las denuncias, sabemos que han sido realizadas ante el ADA por el Municipio, el 13 de diciembre del 2011, la que corre bajo el Expte Nº 2436 - 25037/2011 0 1, el cual se encuentra en la DV de Riego y Uso Agrícola desde el día 16/12/2011. Asimismo, también han sido denunciadas por la Cooperativa de Agua Potable de Mones Cazón, el día 27 de diciembre del 2011, la que corre bajo el Expte. 2436 - 25179/2011 0 1, el cual también se encuentra en ese organismo, desde el día 04/01/2012. Esta situación debe generar alerta, porque no estarían blanqueados (registrados), y a pesar de ello, durante el pasado habrían entrado en funcionamiento, con todo el riesgo que implica utilizar los pozos sin los estudios previos respecto de la vulnerabilidad del acuífero, sin los permisos y sin los controles pertinentes; más si tenemos en cuenta su proximidad con los pozos del pueblo (Mones Cazón). Por ese motivo sería importante saber si el Municipio ha iniciado algún tipo de inspección en los lugares denunciados, si se ha acreditado que los mismos son clandestinos y en su caso, si han sido clausurados por parte del ADA. Como demuestra la realidad, un dato a tener en cuenta a la hora de insistir sobre la necesidad de protección del acuífero y los controles sobre las perforaciones; es que en la mayoría de los casos, los pozos, `para uso agrícola (riego) se han iniciado de manera clandestina. En tal caso, como se recordará en noviembre de 2009, fueron denunciadas perforaciones en la zona de Asturias, por el HCD mediante la Resolución Nº 47/09, y si bien en esa oportunidad, el Municipio no realizó las denuncias ante el ADA como en esta ocasión, si se logró luego de esa resolución, que se blanquearan las perforaciones, y solicitaran los correspondientes permisos de explotación uno el día 19/02/ 2010 (Expte. 2436-18065/2010 01), y el otro, 22/06/2010 (Expte. 2436-19329/2010 01). Sobre estos, seria interesante saber: cuántos pozos se encuentran bajoexplotación en la zona de Asturias; el caudal de agua autorizado y los niveles de salinidad y arsénico de las aguas utilizadas por los regantes.
-N: Ante este grave contexto ¿Cuál es la postura de los vecinos de Mones Cazón?
- Z: Mira, para ser sincero, no he notado gran preocupación en el pueblo por el avance del riego agrícola y las perforaciones clandestinas, a pesar de que este tema nos tendría que inquietar seriamente, y no la posibilidad de que desde el acuífero de Mones Cazón-Magdala se provea agua a la ciudad de Pehuajó, más si tenemos en cuenta que es mínimo el porcentaje que se puede utilizar por el consumo humano en relación a las cantidades de agua que demanda el riego, y sobre todo, teniendo en cuenta que esta práctica avanza y seguirá creciendo. Porque esa es la realidad en la zona, con perforaciones de riego funcionando y otras por funcionar; además, nos consta que más establecimientos están proyectando la instalación de sistemas de riego. En la provincia de Bs. As., por ejemplo en la zona norte en los últimos años ha crecido hasta cuatro veces la cantidad de perforaciones para riego. Y también, porque es intención del Gobierno triplicar las hectáreas bajo riego en el país para los próximos años. Es decir, de los 2,200.000 de hectáreas estimadas en el país bajo riego, se proyecta llevarlas a 6 millones aproximadamente. En consecuencia, debemos preocuparnos -sobre todo-, por la falta de controles sobre la actividad, como en la falta de protección de fuentes de agua de calidad para consumo humano.
-N: ¿Y cuáles serían, por ejemplo, los riegos de la falta de control?
-Z: Si no se controla el riego y las medidas de seguridad del pozo, se puede generar sobreexplotación y contaminación del acuífero, puede suceder la posibilidad de que se tome agua de menor calidad (salada) que puede ingresar a la perforación ascendiendo de zonas más profundas, dado que el agua salada es más pesada y se ubica debajo del agua con menor salinidad. Los riesgos son que al regar con esa agua, se pueda generar salinidad en suelo y, en el caso que desde el mismo acuífero se extraiga agua para consumo humano, podríamos estar tomando algunas sales que son perjudiciales para la salud, como el arsénico.
-N: ¿En tal caso, cuál es el régimen legal para la utilización del agua con fines agrícolas?
-Z: El Código de Agua de la Provincia de Buenos Aires (Ley 12.257) establece el régimen de protección, conservación y manejo de recurso hídrico de la provincia, siendo la Autoridad del Agua el organismo de aplicación. También dispone que el Estado conserva el dominio sobre el agua subterránea, sin perjuicio de ceder su uso a los particulares a través del otorgamiento de concesiones, debiendo abonarse por el uso un canon. Antes de otorgar la concesión de riego, se exige presentar los datos técnicos del proyecto, entre ellos, la evaluación de la influencia de la explotación de la obra de captación sobre el predio y zonas aledañas, y la determinación de la vulnerabilidad del acuífero, entre otras (según resolución ADA). Por otra parte, es importante saber que cualquier persona puede solicitar ante la autoridad pública, la inclusión de la declaración de impacto ambiental, cuando se efectúen aprovechamientos de agua de cierta magnitud, con el fin de que las causas determinantes del impacto sean removidas.
-N: ¿En estas circunstancias, se puede exigir al Municipio que actúe ante la explotación irracional del recurso?
-Z: El Código de Aguas enumera los diferentes usos del recurso, y el riego ocupa el segundo lugar, luego del abastecimiento de agua potable. En caso de riesgo o escasez del servicio en la ciudad o en los pueblos, por el incorrecto manejo del riego, se deberá favorecer el servicio domiciliario y limitar, pudiendo incluso prohibir el uso agropecuario. Lo último debe hacerse por decreto del Ejecutivo provincial, pero la ADA en estos casos puede ordenar remover los sistemas de la práctica, o removerlas ella misma “cuando la demora en hacerlo pusiese en peligro la vida o la salud de las personas o perjudicase a terceros”. Para el caso que la ADA no actúe, se puede reclamar administrativamente, y, llegada la instancia, accionar judicialmente contra ese organismo para que constate las obras de riego, las registre, y las remueva si son perjudiciales y contaminantes.
Ambientalmente, si hay impacto negativo a los recursos naturales (por ejemplo, salinización), se puede reclamar una reparación social. También hay que tener en cuenta que es una falta agraria, que puede ser sancionada con multas, conforme al Código Agrario.
-N: ¿Y qué sucede si el riego atenta contra el uso del agua de la población?
-Sin perjuicio de que pueden darse dos situaciones -la de quienes explotan agua para riego sin tener concesión ni cumplir con los recaudos técnicos fijados por la ADA, y la de las explotaciones de agua registradas (en blanco)-, si se logra comprobar aunque sea con indicios, que la aparatología en uso provoca afectación directa en la disponibilidad de los campos vecinos o a las poblaciones por disminuir el caudal subterráneo, o porque origina una baja en la calidad del agua, el afectado puede intimar al causante del perjuicio que cese la acción ilícita. Se entiende que es ilícita porque surge del propio daño; esta aclaración, porque puede aparecer algún argumento diciendo que no hay ley que prohíba la explotación del agua subterránea, porque le pertenece al dueño del campo. Quienes padecen la falta de caudal suficiente de agua -los campos vecinos o el municipio ante la escasez de agua por parte de las poblaciones- pueden reclamar:1) El cese del riego abusivo; 2) los daños provocados por el impacto en el uso del agua; y 3) la recomposición ambiental.
-N: Por último, ante todo lo expuesto. ¿Qué opina del riego artificial?
-Z: Quiero dejar aclarado que no me opongo a la práctica, además es una actividad que viene creciendo y va a seguir así, como consecuencia de la gran necesidad de producir alimentos ante la enorme demanda internacional; pero lo que no se puede permitir de ninguna manera, es el riego clandestino por el peligro que implica que sea desarrollado sin permiso y sin controles, y en este caso, hay que optimizar los mecanismos; para mitigar, minimizar y modificar los efectos negativos de las acciones depredatorias y contaminantes, que puedan significar un riesgo de deterioro del recurso subterráneo. Y aquí es fundamental la participación de los vecinos denunciando perforaciones e instalación de equipos que puedan resultar clandestinos, por la razón lógica que los organismos de control, no pueden estar en todos lados. Asimismo, es imprescindible establecer zonas de reserva, donde este recurso se encuentre en calidad y cantidad, para preservarlo para consumo de la población.
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