Zaragoza
El 'flash back' de las antenas telefónicas en La Paz
En mayo, los
vecinos celebraban la retirada de la última torre de telefonía en la plaza Gallur. Ahora son los inquilinos de la calle Oviedo quienes recogen firmas para evitar la instalación de otra.
Fernando Arruebo y su mujer, Carmen Sevilla, reparten los meses del año entre Jaca y Zaragoza. Desde junio a noviembre es tiempo de disfrutar en la capital de la Jacetania pero, el resto del año, residen en una parcela del 159 de la calle Oviedo en el barrio de La Paz-.
A principios de noviembre hicieron las maletas para regresar, perocuando llegaron a su hogar, una sorpresa les aguardaba en el buzón. Una carta les informaba sobre la inminente colocación de un antena de telefonía móvil de una conocida compañía- en el edificio contiguo. Y ya era tarde para revocar la decisión porque estaba aprobada por el pleno del Ayuntamiento de Zaragoza con fecha del 27 de septiembre de 2013. Cuando llegamos ya se había pasado el plazo disponible para recurrir, y ahora solo nos queda la vía de poner un recurso contencioso-administrativo ante los Juzgados, el cual ya nos han adelantado que está complemento perdido, lamenta Arruebo, quien espera que el Ayuntamiento de Zaragoza pueda hacer algo.
Ni los vecinos de los edificios aledaños ni la Asociación de Vecinos de La Paz recibimos notificación alguna previa de que se pretendía colocar una antena en este edificio, hasta que el vecino del número 159 recibió el aviso de que había sido aprobada por el pleno del Ayuntamiento de Zaragoza?, critican desde la Asociación de Vecinos de La Paz, quienes puerta por puerta, recogen firmas junto a los afectados desde hace semana. Ya han conseguido más de 500.
Desde Consistorio aseguran que quien autoriza la implantación de la antena es el Ministerio de Industria en función de la potencia y los niveles de emisión de la misma- y desde aquí, la única competencia que tenemos es la de hacer que se cumplan una serie de normas urbanísticas que dependen del tipo de edificio, explican fuentes municipales. Pero nosotros no podemos ni ordenar ni revocar la colocación de las mismas, aclaran.
La historia se repite
En el barrio, la noticia parece un flash back. Después de seis años de reivindicaciones, el pasado mayo, una grúa retiraba la última de las tres grandes antenas instaladas en la plaza Gallur a las que los vecinos achacan serios problemas de salud en la zona-. Y, ahora, sienten que la historia, lamentablemente, vuelve a su origen.
El dueño del 157 dijo que le iban a dar un buen dinero por colocarla ahí, pero él tiene el edificio en alquiler y solo viene de vez en cuando?, explica Sevilla, quien asegura que hay una gran preocupación en el barrio a causa de tal decisión. ¡Todo el mundo dice que aquí ni hablar!, espeta. Los vecinos aseguran que los inquilinos del bloque 157 también desconocían la noticia, aunque ninguno de ellos ha abierto la puerta a este medio de comunicación.
Este es el sitio menos adecuado porque a menos de 100 metros se encentra el Instituto de Educación Secundaria José María Blecua, el Colegio de Primaria Sainz de Varanda, una residencia de ancianos y dos guarderías, critica Gregorio Aguado, otro vecino de la calle Oviedo. Y no entendemos por qué la ponen aquí cuando tienen los montes o edificios más altos muy cerca, defiende Teresa Sevilla.
Gregorio Portillo, un vecino del número 16 de la calle Faustino Casamayoresquina con calle Oviedo, frente al 157-, asegura que hace unos dos o tres años, en su comunidad les ofrecieron poner la antena sobre su azotea y rechazaron la oferta que, aunque no recuerda muy bien, rondaba los 6.000 euros. Nosotros dijimos que no y ahora también estamos en contra, porque además, está prohibido, explica Portillo, quien también ha firmado para evitar la instalación.
Expectantes ante el cambio de la ley
Desde la Asociación de Vecinos de La Paz, a quien este problema les trae de cabeza desde hace mucho tiempo, aseguran que están siguiendo con preocupación la tramitación en el Congreso del Proyecto de Ley General de Telecomunicaciones, en el que se abandona el principio de precaución, a la vez que se prevé la posibilidad de que se imponga a las comunidades de vecinos una servidumbre de paso especial para la autorización de colocar una antena, que ya no darán los Ayuntamientos, sino que será un mero trámite a través del Ministerio de Industria. ?En definitiva, con esta ley los ciudadanos quedan indefensos ante los planes de las operadoras, que podrán instalar sus antenas incluso con la oposición de los vecinos del inmueble, lamentan desde el colectivo.
Instituciones como el Parlamento Europeo, y la Agencia Europea del Medio Ambiente han transmitido a los estados miembros de la Unión Europea la necesidad urgente de poner en marcha medidas precautorias sobre este factor de riesgo en torno a las antenas de telefonía móvil. El Consejo de Europa en 2011 emitió la resolución 1815 instando a adoptar de inmediato las medidas necesarias y oportunas para reducir la exposición de los ciudadanos a todo tipo de radiaciones electromagnéticas. Y, la Organización Mundial de la Salud (OMS), clasificó los campos electromagnéticos de radiofrecuencia como "posible factor cancerígeno en humanos".
Recientemente, en Zaragoza se han eliminado numerosas antenas en la calle Duquesa Villahermosa, Calle Ramiro I, Julián Bel, Monasterio de Siresa, Antonio Tramullas, Avenida Goya y Emilia Pardo Bazán.
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