¿Europa libre de transgénicos?
Por Bárbara Hirtz
En junio se decidirá si los países pueden prohibir los productos transgénicos y si pueden obligar a las multinacionales a que paguen por los daños producidos por ellos.
Transgénicos ¿sí o no? Las aguas sobre este tema están divididas, pero lo cierto es que se observa un comportamiento casi general de rechazo a estos productos.Y frente a estos productos hay muchas personas en contra y otras a favor, en este último lugar se encuentran principalmente las empresas multinacionales que promueven estos productos.
Y respecto los grupos y personas que están en contra, debemos mencionar las concentraciones que se están realizando para repudiar a los transgénicos. En este sentido, en estos días se desarrolló la Tercera edición de la Semana de Lucha contra los Transgénicos.
En esta iniciativa de lucha contra los transgénicos se llevaron a cabo distintas actividades, debates, proyecciones de películas, exposiciones y concentraciones, entre otras actividades más, con el fin de demostrar el repudio a estos productos.
Con esta gama de actividades se evidencia el “deseo mayoritario de la ciudadanía” de poner punto final a los transgénicos. Principalmente, se clama una moratoria inmediata al maíz transgénico de Monsanto, conocido como MON 810.
¿Cuál es la respuesta de los gobiernos y autoridades?
Frente a este repudio, las autoridades de Europa y de los respectivos países de la comunidad están tomando ciertas medidas. Al respecto, la Comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo recientemente votó unas enmiendas que mejoran la propuesta de nueva legislación de transgénicos de la Comisión Europea.
Estas enmiendas permitirían que los países prohíban los transgénicos y obligaría a las multinacionales de estos productos a pagar por los daños producidos por sus “inventos”. Para que esto pueda ser así, primero las enmiendas deberán ser aprobadas. Esta aprobación se decidirá en el plenario del Parlamento el próximo 7 de junio.
Y efectivamente si se aprueban las medidas, Europa estaría yendo hacia un camino libre de transgénicos. De hecho, ya hay diez estados miembros que, de una u otra forma, han prohibido el cultivo de maíz o de patata transgénicos.
Resta unos meses y ya podremos conocer cuál será el camino a seguir de la Unión Europea respecto este polémico tema de ingeniería genética.
Fuente: Diario Qciudadanía / Greenpeace
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