El 15 de julio de 2010 la Cámara de Diputados aprobó por 129 votos contra 86 el proyecto de Ley de Presupuestos Mínimos para la Preservación de Glaciares y Ambiente Periglaciar del diputado Miguel Bonasso, que incorporó varios artículos del proyecto de Daniel Filmus, que provenía con media sanción del Senado. Aunque el bloque oficialista no acompañó esta iniciativa de consenso, Filmus aseguró que el Poder Ejecutivo no vetará la Ley que salga del Congreso.
El quid de la cuestión radica en el concepto de "ambiente periglaciar" presente en el artículo 2, que incluye los suelos congelados integrados en el ecosistema del glaciar, en donde se estarían desarrollando en la actualidad los emprendimientos mineros. Por otra parte, se insiste en que es el Congreso el órgano con facultad de sancionar esta ley de presupuestos mínimos, que sienta las bases de protección que deben cumplir todas las provincias.
En la fusión de ambos proyectos, se explicita que el glaciar es un "bien de carácter público", incluyéndose los glaciares de mediana y baja montaña. Además, se mantiene la definición del concepto de ambiente periglaciar presente en el artículo 2, que incluye no solo los glaciares de escombro, sino también al "área con suelo congelado que actúa como regulador del recurso hídrico". Este artículo 2 tuvo una votación más ajustada, con 114 votos positivos.
Luego del acercamiento, el jefe de la bancada oficialista Agustín Rossi planteó una moción de orden para suspender el tratamiento por 15 días por pedido de diputados de su bloque, por lo cual las nuevas sesiones se llevaron a cabo el miércoles 4 de agosto.
Aunque suene increíble, la oposición que más de dos semanas atrás había forzado la convocatoria, para el día de ayer no logró reunir el quórum para aprobar la iniciativa. Luego de 45 minutos de la hora fijada para comenzar el debate, sólo había 127 legisladores sentados en sus bancas, dos menos de los necesarios (129) para abrir la sesión. Fue entonces que el jefe del bloque del FpV, Agustín Rossi ocupó su banca y pidió que se dé por caída la sesión.
Una auténtica vergüenza. Aun cuando se conocía la postura del oficialismo (que así y todo dio vía libre para que Filmus acuerde con Bonasso). ¿Qué lugar le queda a la oposición en la que muchos de sus miembros habían comprometido su presencia y aún más sabiendo que poseían quórum propio? ¿Dónde quedó su responsabilidad parlamentaria?
Es evidente que no todos los congresistas del denominado campo opositor poseen las mismas prioridades.
Teniendo una oportunidad histórica de generar legislación que salvaguarde un recurso tan fundamental como el agua, fueron sensibles al lobby de las multinacionales mineras y brillaron por su ausencia.
FOCO lamenta lo sucedido y espera que en el Congreso se apruebe la Ley de Glaciares y no se repita tan lamentable episodio.
Observatorio de las Empresas Transnacionales
FOCO Foro Ciudadano de Participación por la
Justicia y los Derechos Humanos
Castillo 460
Buenos Aires -Argentina
telefax: 54 11 47728922
www.foco.org.ar
El quid de la cuestión radica en el concepto de "ambiente periglaciar" presente en el artículo 2, que incluye los suelos congelados integrados en el ecosistema del glaciar, en donde se estarían desarrollando en la actualidad los emprendimientos mineros. Por otra parte, se insiste en que es el Congreso el órgano con facultad de sancionar esta ley de presupuestos mínimos, que sienta las bases de protección que deben cumplir todas las provincias.
En la fusión de ambos proyectos, se explicita que el glaciar es un "bien de carácter público", incluyéndose los glaciares de mediana y baja montaña. Además, se mantiene la definición del concepto de ambiente periglaciar presente en el artículo 2, que incluye no solo los glaciares de escombro, sino también al "área con suelo congelado que actúa como regulador del recurso hídrico". Este artículo 2 tuvo una votación más ajustada, con 114 votos positivos.
Luego del acercamiento, el jefe de la bancada oficialista Agustín Rossi planteó una moción de orden para suspender el tratamiento por 15 días por pedido de diputados de su bloque, por lo cual las nuevas sesiones se llevaron a cabo el miércoles 4 de agosto.
Aunque suene increíble, la oposición que más de dos semanas atrás había forzado la convocatoria, para el día de ayer no logró reunir el quórum para aprobar la iniciativa. Luego de 45 minutos de la hora fijada para comenzar el debate, sólo había 127 legisladores sentados en sus bancas, dos menos de los necesarios (129) para abrir la sesión. Fue entonces que el jefe del bloque del FpV, Agustín Rossi ocupó su banca y pidió que se dé por caída la sesión.
Una auténtica vergüenza. Aun cuando se conocía la postura del oficialismo (que así y todo dio vía libre para que Filmus acuerde con Bonasso). ¿Qué lugar le queda a la oposición en la que muchos de sus miembros habían comprometido su presencia y aún más sabiendo que poseían quórum propio? ¿Dónde quedó su responsabilidad parlamentaria?
Es evidente que no todos los congresistas del denominado campo opositor poseen las mismas prioridades.
Teniendo una oportunidad histórica de generar legislación que salvaguarde un recurso tan fundamental como el agua, fueron sensibles al lobby de las multinacionales mineras y brillaron por su ausencia.
FOCO lamenta lo sucedido y espera que en el Congreso se apruebe la Ley de Glaciares y no se repita tan lamentable episodio.
Observatorio de las Empresas Transnacionales
FOCO Foro Ciudadano de Participación por la
Justicia y los Derechos Humanos
Castillo 460
Buenos Aires -Argentina
telefax: 54 11 47728922
www.foco.org.ar
No hay comentarios:
Publicar un comentario