8 CLAVES
GUALEGUAYCHÚ ENTRE RÍOS
dOmiNGO 25 dE OCTUBRE dE 2009
Mientras los nuestros no tienen idea
Ministros del gobierno ingles advirtien a la Argentina por el cambio climático
A confesión de parte relevo de prueba
El gobierno de Entre Ríos reconoce que autorizó más de 200 desmontes
La Dirección de Recursos Naturales ante un pedido de información (*), admitió que en Entre Ríos se talaron montes nativos para incrementar la superficie cultivada de soja.
Fueron autorizados en campos ubicados en los departamentos Feliciano, Federal, Villaguay, Tala, La Paz y Paraná, donde se encuentra el 87 por ciento de los bosques nativos de la provincia
Según registros oficiales, el Gobierno de Entre Ríos otorgó permisos para efectuar 206 talas de monte nativo entre los años 2004 y 2006. Eso significó que 12.904 hectáreas quedaran liberadas para la agricultura en seis departamentos del centro y norte de la provincia.
El informe lleva la firma del director de Recursos Naturales, Conrado González, quien señaló: "Para proceder a realizar estas autorizaciones (de desmonte) se debieron efectuar unas 322 inspecciones pre-desmonte y post-desmonte con el personal técnico y realizar el estudio fotogramétrico de cada lote en particular, realizando su evaluación".
Este dato resulta especialmente penoso a Fundavida, porque este funcionario es el mismo que cuando denunciamos un desmonte no autorizado que se estaba efectuando en las costas del arroyo Venerato, nos respondió…"que no tenía medios para controlar".
O sea que para autorizar 206 desmontes puede hacer 322 inspecciones, pero para impedir uno…"no tiene medios".
Nuestra frontal oposición al Código Ambiental, que esta elaborando en la Cámara de Diputados, se ratifica una vez mas, porque prevé la continuidad y jerarquización del organismo que dirige este funcionario, que ha manifestado su ineptitud y falta de vocación para el cumplimiento de sus responsabilidades en reiteradas oportunidades.
Además, el mismo informe precisa en otro de sus párrafos: "Por otra parte, la soja fue el cultivo de mayor participación, estando presente en más del 75 % de las rotaciones. En la definición de las rotaciones propuestas primó el hecho de que el área con Vertisoles cuenta con mayor historia ganadera y agrícola que aquella con Alfisoles. En éstas el uso ha sido preponderantemente ganadero de cría en monte, pasando directamente a un uso agrícola a pesar de no tener capacidad para ello, aumentando su fragilidad".
Y sigue: "El desmonte de estas tierras, por su fragilidad y vulnerabilidad a los procesos de degradación, requerirá el uso de tecnología adecuada a sus limitantes y la implementación de mayor conocimiento científico para conocer la evolución del recurso a través de indicadores de calidad y salud de los suelos que le permitan además, en un futuro inmediato, tramitar las autorizaciones con mayores elementos técnico científicos".
De acuerdo al informe "el área está ocupada por suelos de los Órdenes Vertisol y Alfisol en más del 70 %. Éstos presentan una aptitud generalmente restringida para diferentes alternativas productivas intensivas, con limitaciones tales como erosión hídrica, altos contenidos de arcillas expandibles, drenaje interno impedido y drenaje superficial deficiente en los se El otro trabajo, titulado Uso de la tierra en el área de bosques nativos de Entre Ríos advierte que "la práctica de desmonte es común, realizándose en la mayoría de los casos sin una planificación previa al uso que se le dará a las tierras en el largo plazo".
De acuerdo al informe "el área está ocupada por suelos de los Órdenes Vertisol y Alfisol en más del 70 %. Éstos presentan una aptitud generalmente restringida para diferentes alternativas productivas intensivas, con limitaciones tales como erosión hídrica, altos contenidos de arcillas expandibles, drenaje interno impedido y drenaje superficial deficiente en los sectores planos y/o deprimidos".
Tras hacer referencia al cruce de información entre las cartas de suelos de Entre Ríos y los datos de los últimos censos nacionales, el documento precisa que "existe también una concentración de la producción, ya que aquellos productores que dejaron de producir y no vendieron sus tierras, las cedieron bajo distintos regímenes de tenencia, siendo el destino mayoritario la aparecería o contrato accidental para la agricultura".
El trabajo también describe que "se observó además que predomina la secuencia de diferentes cultivos y no la rotación de pasturas, para la generalidad de los casos, donde el cultivo de soja participa en una elevada proporción, mostrándose como el antecesor casi único de los demás cultivos"
(*) El pedido de informes fue efectuado por la fundación M’Bigua de Paraná.
Como preparación para la cumbre de Copenhague sobre cambio climático los ministros británicos de Asuntos Exteriores y de Energía y Cambio, David Miliband y Ed Miliband, presentaron un mapa que ilustra las consecuencias apocalípticas que el cambio climático tendrá en la Tierra cuando las temperaturas suban sólo cuatro grados, en los próximos años.
Según expertos, es el mapa más completo que se ha hecho hasta el momento y augura un escenario particularmente catastrófico para la Argentina.
Las consecuencias serán tremendas: temperaturas extremas, sequías, incendios forestales, aumento del nivel del mar, derrumbe de la producción agrícola y dramática escasez de agua potable.
Estamos en el umbral de un mundo en el que reinará la muerte, la destrucción y la pobreza, con cuatro grados, se derretirían los polos, subiría el nivel del mar y ciudades como Buenos Aires, Montevideo, Rosario, Comodoro Rivadavia ó Nueva York desaparecerán.
Si aumenta la temperatura en solo 4 grados, el recalentamiento global le dará un golpe despiadado a la economía Argentina: los cultivos de trigo y maíz retrocederán un 40% y peor sucederá con la soja.
Los glaciares serán un recuerdo y la Patagonia pasará de árida a desértica.
La acidificación del mar se llevará puesto al ecosistema marino del Atlántico sur y desaparecerá nuestra producción pesquera.
Los bosques del Sur, las selvas del Norte y los montes de arbustos (los de Córdoba, por ejemplo), vivirían de incendio en incendio, preanunciando su destino de desierto.
El director del Museo de la Ciencia británico y uno de los artífices del mapa, el profesor Chris Rapley, señaló: "El cambio climático es algo real, ocasionado por los humanos y potencialmente amenazante para nuestras reservas de comida y agua, para nuestra salud y para nuestra seguridad. El mapa se basa en evidencias científicas.
Detrás de todo está la dependencia del mundo moderno, globalizado, con el incremento de las cantidades de energía producidas por combustibles de hidrocarburos". "Hay un límite en la atmósfera de cuánto podemos quemar, entonces resulta esencial que todos nos controlemos".
El director del equipo de apoyo para el Cambio Climático de la Naciones Unidas (ONU), Janos Pasztor explicó: …"hay una gran diferencia entre la retórica de los líderes mundiales y las propuestas reales de sus negociadores",
Pasztor hizo estas declaraciones en el marco de las últimas conversaciones sobre cambio climático celebradas en Bangkok y de la reunión de la asamblea de la ONU el mes pasado en Nueva York, donde los presidentes y representantes de más de doscientos países mostraron su deseo de que se alcance un compromiso férreo en la cumbre de Copenhague de diciembre.
GUALEGUAYCHÚ ENTRE RÍOS
dOmiNGO 25 dE OCTUBRE dE 2009
Mientras los nuestros no tienen idea
Ministros del gobierno ingles advirtien a la Argentina por el cambio climático
A confesión de parte relevo de prueba
El gobierno de Entre Ríos reconoce que autorizó más de 200 desmontes
La Dirección de Recursos Naturales ante un pedido de información (*), admitió que en Entre Ríos se talaron montes nativos para incrementar la superficie cultivada de soja.
Fueron autorizados en campos ubicados en los departamentos Feliciano, Federal, Villaguay, Tala, La Paz y Paraná, donde se encuentra el 87 por ciento de los bosques nativos de la provincia
Según registros oficiales, el Gobierno de Entre Ríos otorgó permisos para efectuar 206 talas de monte nativo entre los años 2004 y 2006. Eso significó que 12.904 hectáreas quedaran liberadas para la agricultura en seis departamentos del centro y norte de la provincia.
El informe lleva la firma del director de Recursos Naturales, Conrado González, quien señaló: "Para proceder a realizar estas autorizaciones (de desmonte) se debieron efectuar unas 322 inspecciones pre-desmonte y post-desmonte con el personal técnico y realizar el estudio fotogramétrico de cada lote en particular, realizando su evaluación".
Este dato resulta especialmente penoso a Fundavida, porque este funcionario es el mismo que cuando denunciamos un desmonte no autorizado que se estaba efectuando en las costas del arroyo Venerato, nos respondió…"que no tenía medios para controlar".
O sea que para autorizar 206 desmontes puede hacer 322 inspecciones, pero para impedir uno…"no tiene medios".
Nuestra frontal oposición al Código Ambiental, que esta elaborando en la Cámara de Diputados, se ratifica una vez mas, porque prevé la continuidad y jerarquización del organismo que dirige este funcionario, que ha manifestado su ineptitud y falta de vocación para el cumplimiento de sus responsabilidades en reiteradas oportunidades.
Además, el mismo informe precisa en otro de sus párrafos: "Por otra parte, la soja fue el cultivo de mayor participación, estando presente en más del 75 % de las rotaciones. En la definición de las rotaciones propuestas primó el hecho de que el área con Vertisoles cuenta con mayor historia ganadera y agrícola que aquella con Alfisoles. En éstas el uso ha sido preponderantemente ganadero de cría en monte, pasando directamente a un uso agrícola a pesar de no tener capacidad para ello, aumentando su fragilidad".
Y sigue: "El desmonte de estas tierras, por su fragilidad y vulnerabilidad a los procesos de degradación, requerirá el uso de tecnología adecuada a sus limitantes y la implementación de mayor conocimiento científico para conocer la evolución del recurso a través de indicadores de calidad y salud de los suelos que le permitan además, en un futuro inmediato, tramitar las autorizaciones con mayores elementos técnico científicos".
De acuerdo al informe "el área está ocupada por suelos de los Órdenes Vertisol y Alfisol en más del 70 %. Éstos presentan una aptitud generalmente restringida para diferentes alternativas productivas intensivas, con limitaciones tales como erosión hídrica, altos contenidos de arcillas expandibles, drenaje interno impedido y drenaje superficial deficiente en los se El otro trabajo, titulado Uso de la tierra en el área de bosques nativos de Entre Ríos advierte que "la práctica de desmonte es común, realizándose en la mayoría de los casos sin una planificación previa al uso que se le dará a las tierras en el largo plazo".
De acuerdo al informe "el área está ocupada por suelos de los Órdenes Vertisol y Alfisol en más del 70 %. Éstos presentan una aptitud generalmente restringida para diferentes alternativas productivas intensivas, con limitaciones tales como erosión hídrica, altos contenidos de arcillas expandibles, drenaje interno impedido y drenaje superficial deficiente en los sectores planos y/o deprimidos".
Tras hacer referencia al cruce de información entre las cartas de suelos de Entre Ríos y los datos de los últimos censos nacionales, el documento precisa que "existe también una concentración de la producción, ya que aquellos productores que dejaron de producir y no vendieron sus tierras, las cedieron bajo distintos regímenes de tenencia, siendo el destino mayoritario la aparecería o contrato accidental para la agricultura".
El trabajo también describe que "se observó además que predomina la secuencia de diferentes cultivos y no la rotación de pasturas, para la generalidad de los casos, donde el cultivo de soja participa en una elevada proporción, mostrándose como el antecesor casi único de los demás cultivos"
(*) El pedido de informes fue efectuado por la fundación M’Bigua de Paraná.
Como preparación para la cumbre de Copenhague sobre cambio climático los ministros británicos de Asuntos Exteriores y de Energía y Cambio, David Miliband y Ed Miliband, presentaron un mapa que ilustra las consecuencias apocalípticas que el cambio climático tendrá en la Tierra cuando las temperaturas suban sólo cuatro grados, en los próximos años.
Según expertos, es el mapa más completo que se ha hecho hasta el momento y augura un escenario particularmente catastrófico para la Argentina.
Las consecuencias serán tremendas: temperaturas extremas, sequías, incendios forestales, aumento del nivel del mar, derrumbe de la producción agrícola y dramática escasez de agua potable.
Estamos en el umbral de un mundo en el que reinará la muerte, la destrucción y la pobreza, con cuatro grados, se derretirían los polos, subiría el nivel del mar y ciudades como Buenos Aires, Montevideo, Rosario, Comodoro Rivadavia ó Nueva York desaparecerán.
Si aumenta la temperatura en solo 4 grados, el recalentamiento global le dará un golpe despiadado a la economía Argentina: los cultivos de trigo y maíz retrocederán un 40% y peor sucederá con la soja.
Los glaciares serán un recuerdo y la Patagonia pasará de árida a desértica.
La acidificación del mar se llevará puesto al ecosistema marino del Atlántico sur y desaparecerá nuestra producción pesquera.
Los bosques del Sur, las selvas del Norte y los montes de arbustos (los de Córdoba, por ejemplo), vivirían de incendio en incendio, preanunciando su destino de desierto.
El director del Museo de la Ciencia británico y uno de los artífices del mapa, el profesor Chris Rapley, señaló: "El cambio climático es algo real, ocasionado por los humanos y potencialmente amenazante para nuestras reservas de comida y agua, para nuestra salud y para nuestra seguridad. El mapa se basa en evidencias científicas.
Detrás de todo está la dependencia del mundo moderno, globalizado, con el incremento de las cantidades de energía producidas por combustibles de hidrocarburos". "Hay un límite en la atmósfera de cuánto podemos quemar, entonces resulta esencial que todos nos controlemos".
El director del equipo de apoyo para el Cambio Climático de la Naciones Unidas (ONU), Janos Pasztor explicó: …"hay una gran diferencia entre la retórica de los líderes mundiales y las propuestas reales de sus negociadores",
Pasztor hizo estas declaraciones en el marco de las últimas conversaciones sobre cambio climático celebradas en Bangkok y de la reunión de la asamblea de la ONU el mes pasado en Nueva York, donde los presidentes y representantes de más de doscientos países mostraron su deseo de que se alcance un compromiso férreo en la cumbre de Copenhague de diciembre.
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